Optimizando la partición de la red
3 ¿Cuál suele ser la situación real y corriente?
De todas formas, el caso más normal con el que nos encontraremos será una empresa u organización con una o varias direcciones IP públicas, asignadas por su ISP (Proveedor de Servicios de Internet), que serán usadas por router/firewall, encargados de dar salida a Internet a todos los host internos. Tras los routers habrá normalmente uno o más servidores Proxy, que serán los que se encargarán de gestionar las peticiones de servicios externos de los host, y tras él/ellos tendremos una red interna, privada, formada por diferentes host, servidores de aplicaciones, servidores de datos, impresoras, etc.
En estos casos, el administrador o diseñador de la red interna dispondrá de todo un rango de IPs disponibles para realizar las particiones, pudiendo usar la clase IP privada (clase A, B o C) que más le convenga. No obstante, es muy importante también el cálculo óptimo de la partición, a fin de limitar al máximo los dominios de colisión y el ancho de banda consumido por los broadcast.
Existen para ello direcciones IP reservadas, privadas, para usos internos, que se establecieron por convenio. Estas direcciones no son vistas desde el exterior, no son públicas, y sus rangos son:
- Clase A:
- Clase B: a
- Clase C: (con X variando).